Historia de Ruben Dario
Historia del máximo representante del Modernismo
Nació el 18 de enero de 1867 en Nicaragua, fue un poeta, diplomático, máximo representante del modernismo literario en la lengua española.
A los 19 años de edad viaja a Chile donde publico su primer poemario "Azul" fue un libro que llamo la atención de la critica. Es llamado el príncipe de las letras castellanas. Su verdadero nombre era Felix Ruben Garcia Sarmiento.
Yo sé que hay quienes dicen: ¿por qué no canta ahora
Obras:
- AZUL: Fue su obra mas importante, una obra que dedico a su infancia y juventud, trabajo con todas las métricas, estilos y vocabularios algo que fue soprendente para alguien que en su tiempo era extremadamente joven.
- PROSAS PROFANAS: Fue un libro de obras que lo consagra como líder del movimiento modernista. Su poesia es perturbadoras y contiene metricas nunca antes leidas en español.
- CANTOS DE VIDA Y ESPERANZA: Se considera como su obra en verso mas importante. Domina con fuerza el ritmo y maneja el lenguaje con flexibilidad. Trata temas de identidad Americana.
Poemas:
De otoño
con aquella locura armoniosa de antaño?
Ésos no ven la obra profunda de la hora,
la labor del minuto y el prodigio del año.
Yo, pobre árbol, produje, al amor de la brisa,
cuando empecé a crecer, un vago y dulce son.
Pasó ya el tiempo de la juvenil sonrisa:
¡dejad al huracán mover mi corazón!
Venus
En la tranquila noche, mis nostalgias amargas sufría.
En busca de quietud, bajé al fresco y callado jardín.
En el oscuro cielo, Venus bella temblando lucía,
como incrustado en ébano un dorado y divino jazmín.
En busca de quietud, bajé al fresco y callado jardín.
En el oscuro cielo, Venus bella temblando lucía,
como incrustado en ébano un dorado y divino jazmín.
A mi alma enamorada, una reina oriental parecía,
que esperaba a su amante, bajo el techo de su camarín,
o que, llevada en hombros, la profunda extensión recorría,
triunfante y luminosa, recostada sobre un palanquín.
que esperaba a su amante, bajo el techo de su camarín,
o que, llevada en hombros, la profunda extensión recorría,
triunfante y luminosa, recostada sobre un palanquín.
«¡Oh reina rubia! -dije-, mi alma quiere dejar su crisálida
y volar hacia ti, y tus labios de fuego besar;
y flotar en el nimbo que derrama en tu frente luz pálida,
y volar hacia ti, y tus labios de fuego besar;
y flotar en el nimbo que derrama en tu frente luz pálida,
y en siderales éxtasis no dejarte un momento de amar.»
El aire de la noche, refrescaba la atmósfera cálida.
Venus, desde el abismo, me miraba con triste mirar.
El aire de la noche, refrescaba la atmósfera cálida.
Venus, desde el abismo, me miraba con triste mirar.
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